¿Buscas una forma diferente y sabrosa de disfrutar del brócoli? Este brócoli con bechamel gratinado al horno es la receta perfecta: cremosa, reconfortante y con ese toque dorado irresistible del queso fundido. Ideal como entrante o acompañamiento, se prepara en apenas 20 minutos y conquista hasta a los que dicen no ser fans del brócoli.
¿Por qué preparar brócoli con bechamel?
Porque es una de esas recetas sencillas que transforman un ingrediente tan saludable como el brócoli en un plato lleno de sabor.
La bechamel casera aporta suavidad y una textura cremosa que combina a la perfección con el punto crujiente del gratinado. Además, es una forma ideal de que los más pequeños coman verduras sin poner pegas.
Ingredientes para el brócoli con bechamel (2 raciones)
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700 g de brócoli
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Sal al gusto
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30 g de mantequilla
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30 g de harina de trigo
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350 ml de leche entera
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Pimienta negra molida
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Una pizca de nuez moscada
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100 g de queso rallado para gratinar
Consejo: si prefieres una versión más ligera, sustituye la mantequilla por aceite de oliva y la leche entera por bebida vegetal.
Cómo hacer brócoli con bechamel paso a paso
1. Preparar el brócoli
Corta los ramilletes en trozos de tamaño similar, lávalos bien y cuécelos en agua con sal durante unos 3 minutos. Escúrrelos y colócalos sobre papel absorbente para eliminar el exceso de humedad.

2. Hacer la bechamel casera
En un cazo, derrite la mantequilla a fuego medio. Añade la harina y remueve durante un minuto hasta que se dore ligeramente.
Vierte la leche poco a poco sin dejar de remover con unas varillas para evitar grumos.
Agrega sal, pimienta y una pizca de nuez moscada, y cocina unos 5 minutos hasta obtener una bechamel suave y espesa.

3. Montar el plato
En una fuente apta para horno, extiende una fina capa de bechamel en la base. Coloca el brócoli encima y cúbrelo con el resto de la salsa.
Espolvorea el queso rallado de manera uniforme.

4. Gratinar
Introduce la fuente en el horno precalentado a 200 ºC con la función gratinador y hornea durante 5 minutos, o hasta que el queso esté dorado y burbujeante.

¿Se puede hacer brócoli con bechamel sin horno?
Sí, por supuesto. Si no tienes horno, puedes terminar la receta en una sartén con tapa: cocina el brócoli con la bechamel unos minutos a fuego bajo hasta que espese, y añade el queso al final para que se funda con el calor residual. No quedará tan gratinado, pero estará igual de cremoso y delicioso.
¿Puedo usar leche vegetal para la bechamel?
Claro que sí. La bechamel sale perfecta con bebida de avena o de soja sin azúcar.
Solo debes tener en cuenta que el sabor será un poco más dulce, así que compénsalo con una pizca extra de sal o una cucharadita de levadura nutricional si prefieres mantener el perfil salado.
¿El brócoli con bechamel gusta a los niños?
Sí, definitivamente. La textura cremosa y el toque de queso hacen que esta receta sea una excelente forma de introducir el brócoli en la dieta infantil. Puedes incluso triturarlo todo para crear una crema suave y servirlo como puré gratinado.
¿Cómo conservar el brócoli con bechamel sobrante?
Guárdalo en un recipiente hermético en la nevera hasta 2 días.
Para recalentarlo, basta con unos minutos en el microondas o en el horno a baja temperatura. Si notas que se ha secado un poco, añade una cucharada de leche antes de calentar para devolverle su cremosidad.
Un clásico que siempre apetece
El brócoli con bechamel al horno es una receta sencilla, económica y llena de sabor. Perfecta para un día entre semana o para acompañar tus platos de carne o pescado.
Con muy pocos ingredientes, consigues un resultado digno de restaurante… pero hecho en casa.
Tiempo total: 20 minutos
Raciones: 2
Dificultad: fácil
Calorías aproximadas: 510 kcal por ración

